Miradores, calas y otros destinos naturales que ver en la ría de Vigo


La fama del ecoturismo en Vigo crece año tras año, y los destinos de naturaleza que configuran esta ría, ayudan a entender por qué. El público senderista, ciclista, buceador y seguidor de otros deportes al aire libre encuentra no pocas razones para visitar la ría más profunda de Galicia, empezando por Rodas, una playa de islas cies cuyo entorno natural y aire paradisíaco la sitúan entre las mejores del mundo.

Rodas se ubica entre las islas do Faro y Monteagudo y posee más de mil metros de longitud, con arenas blancas y aguas tranquilas, dotadas con Bandera Azul. Su interés reside en parte en el archipiélago en que se enmarca, las Cíes, que justifican en sí mismas una escapada turística.

Para conseguir fotografías y selfies únicos, Punta Subrido es una elevación sita en el Cabo Home, en la sección oeste de la Península del Morrazo. Posee una torre cilíndrica de trece metros que funciona como faro. Su luminaria es distinguible a diez millas náuticas, nada menos.

Otro mirador famoso en la ría de Vigo es A Guía, coronando el monte de nombre homónimo, de cien metros de altitud. Este promontorio natural ofrece una panorámica de las Islas Cíes, Nosa Señora das Neves o la playa de A Punta, que se asienta en su misma falda, con cincuenta metros de longitud y una anchura variable, pues la pleamar cubre en gran medida sus arenas.

Sin abandonar la parroquia de Teis, los viajeros se asombran de las aguas solitarias y tranquilas de la Cala do Faro. Sin lugar a dudas, una parada obligada para quienes busquen un remanso de paz sin salir del municipio vigués. No obstante, las experiencias de buceo y esnórquel se disfrutan más en «La Sirenita», como se apoda a la playa de A Fontaíña, a veinte minutos del centro de Vigo. Sus casi tres cientos metros de arena blanca trazan una media luna.